Elevación natural de 300 metros de altura en cuya cima se aprecia un mirador llamado “El Caracol” desde donde podrá observar los hermosos atardeceres de Hermosillo. 

Este lugar es sin duda el mirador por excelencia de la ciudad de Hermosillo, ya que desde la cima, es posible apreciar una panorámica casi completa de “La Ciudad del Sol”.

Debe su nombre porque, al verse de oriente a poniente, parece una campana. Sin embargo, también se dice que se debe al sonido que hacen las rocas en la parte más alta, ya que al ser golpeadas producen un sonido que asemeja a una campana.

A este cerro puede subirse en automóvil gracias a sus caminos empedrados, y a su buena iluminación, sin embargo se recomienda precaución. Su acceso es por las calles Rosales y Pino Suárez y cuenta con un estacionamiento en la cima.

Sin embargo, la mejor experiencia es subirlo a pie. En la parte más alta no solamente puedes disfrutar de la vista, si no también hay una cafetería en donde puedes disfrutar bebidas refrescantes y antojitos.

La mejor hora para subir es cerca del atardecer para gozar de una vista panorámica de Hermosillo, junto con los famosos rojizos que regala a esta hora los cielos de Sonora.