Es un área protegida con maravillosos manglares que albergan un rico ecosistema, incluyendo a cientos de aves acuáticas.

El Palmar alberga al faro más alto de Yucatán. Sus playas, a pesar de ser casi vírgenes, cuentan con servicios de cabañas y restaurantes. 

Se pueden alquilar lanchas para dar un paseo y observar la fauna regional.