La Casa Montejo es uno de los edificios con más historia en la ciudad.

Fue construida entre 1542 y 1549, por órdenes de Francisco de Montejo, el fundador de la ciudad.

Se localiza al sur de la plaza principal y es uno de los edificios más importantes de la ciudad.

Con un estilo plateresco, fue hecha con mano de obra indígena. De la construcción original sólo se conserva el pórtico de cantera que data del siglo XVI.

En la fachada, se destacan las figuras de dos guerreros que descansan sobre la raza maya.

En el balcón de la planta alta, se puede observar el escudo de armas de Francisco Montejo.

El resto del edificio está reconstruido con influencia francesa.

Actualmente aloja a un museo con cuatro salas que corresponden a las habitaciones destinadas a el despacho-biblioteca, la estancia, la recámara y el comedor, todas con mobiliario y ambiente de fines del siglo XIX y principios del siglo XX.

El museo también cuenta con tres salas temporales donde se exhiben obras de artistas locales, maestros del arte popular, o bien se presentan conciertos y conferencias.

Hay una librería con interesantes volúmenes y una tienda en donde se ofrecen atractivas artesanías.