Cuenta con una extensión de 450,000 m2 y se localiza en la falda del Cerro Gordo, una zona exclusiva de León. Sus hoyos corren a través de un paisaje arbolado, ya que hay más de 20,000 árboles y un green de práctica de más de 1,000 m2.

Los greens tienen pendientes muy retadores y están protegidos por trampas y lomas que desafían al tiro corto, mientras que los fairways cuentan con zonas de aterrizaje resguardadas por trampas profundas de arena. Los roughs, invitan al jugador a realizar golpes estratégicos y están rodeados por un paisaje boscoso de más de 5,000 enormes fresnos, jacarandas, casuarinas, eucaliptos y mezquites, por mencionar algunos.

En ocho hoyos se pueden encontrar profundos lagos y el green 18 esta enmarcado por una cascada.

El retador campo se puede recorrer a pie o en carrito sobre los caminos de adoquín emboquillado.