En este sitio sobresale un basamento piramidal que se ubica en las faldas del Cerro del Elefante que fue construido mediante una serie de plataformas en donde se pueden ver tres etapas constructivas.

En la parte superior se encontraron tres tumbas con restos humanos y ofrendas que comprendían vasijas, figurillas, objetos de obsidiana y serpentina (piedra verde y muy dura) y jade.

En las cercanías de la zona arqueológica se encontraron restos de los primeros habitantes de la cuenca de México que se remontan al año 30,000 a.C.