Este poblado tiene un importante legado histórico ya que albergó a Benito Juárez en su Paso del Norte. Todavía se conserva la casa de este importante personaje histórico.

Cerca de la Plaza Principal puedes observar un muro de aproximadamente ocho metros de alto que servía para jugar con una pelota de caucho y la mano.

Cuenta con un aire muy misterioso ya que su panteón tiene más de tres siglos de antigüedad y es un lugar interesante para visitar, ya que además de los epitafios de piedra puedes ver ataúdes de roca que han emergido a la superficie.

Aquí se destaca el templo de San Francisco Javier que data del siglo XVIII y es uno de los templos más antiguos del estado. Adicionalmente, resguarda misteriosos túneles subterráneos y catacumbas. Estos túneles fueron usados principalmente en la época de la Revolución.

Todavía se pueden distinguir varios vestigios de viejas construcciones que datan de la época colonial y el casco de la Hacienda de Guadalupe de Bagües que data del siglo XIX.

A pocos kilómetros se encuentra Peñoles, pequeña sierra que ostenta una serie de formaciones graníticas con algunas pinturas rupestres.