El parque comprende 51.000 hectáreas (126.000 acres) y es un área protegida salpicado de bosques de abetos y pinos. Es el cuarto pico más alto del país y se eleva sobre la ciudad de Toluca.

El parque se encuentra dentro del denominado Eje Neovolcánico con altitudes que oscilan entre los 3.000 y 4.500 metros sobre el nivel del mar. A partir de los 4.100 m sobre el nivel del mar la vegetación comienza a desaparecer. El clima a esta altitud es semifrío-húmedo, produciéndose fuertes nevadas en la cima durante la temporada invernal.

Es el único volcán del mundo al que se puede llegar por carretera y en la cima se encuentran dos hermosas lagunas de aguas cristalinas, la Laguna del Sol (4209 msnm) y la Laguna de la Luna (4216 msnm). Son un lugar único para practicar el buceo de profundidad donde también se han encontrado ofrendas prehispánicas.

El borde del cráter es elíptico y se asemeja a una corona. En su crestería sobresalen dos picachos, el del Águila y el del Fraile.

Si deseas vivir una aventura existen tours que te brindarán el equipo necesario para realizar caminatas.

Las rutas seleccionadas dependerán de lo que quieras hacer y experimentar. El más común comienza con el Pluma, a menos de 4 millas del cráter del volcán. Es una ruta que casi todo el mundo puede hacer.

Para la ruta de aventura es necesario tener una buena condición física y el equipo adecuado. Requerirás más de 3 horas, y estarás expuesto a un clima húmedo y rayos directos del sol.

En las faldas del volcán se encuentra el Parque Los Venados, con áreas de recreación y descanso. Cuenta con quioscos con asadores para disfrutar de un picnic en familia.

Además de hacer caminatas en el parque, puedes alquilar cuatrimotos, disfrutar de cabalgatas y la emoción del ciclismo de montaña con pistas de downhill.

El Parque Nacional Nevado de Toluca cuenta con tres albergues, dos equipados con todos los servicios y el último solo con servicio de hospedaje.

En tu visita te recomendamos llevar una batería portátil ya que debido a las bajas temperaturas se reduce la duración y mantenimiento de las baterías de cámaras y celulares.

Aunque cualquier época del año es buena para visitar el Nevado, si te gusta la nieve, lo mejor es ir entre diciembre y febrero, aunque estos meses son helados, por lo que debes prepararte para este clima. Si no te gusta el frío, visita entre junio y julio.