Es uno de los rincones más bellos de Morelia con construcciones de piedra y elaborada herrería.

Este pintoresco callejón está enmarcado por frondosas bugambilias y en el centro hay dos bellas fuentes.

Antes de ser turística era el pasillo de los trabajadores de una fábrica de jabón que tenían sus casas a lo largo del callejón para poder llegar rápido a la fábrica. Y su nombre no fue siempre este, antes fue conocido como “Callejón de la Bolsa” y más tarde como “Callejón del Socialismo”.

Sin embargo, en 1965 se remodeló el callejón y sus 19 inmuebles se encuentran dentro del catálogo de monumentos históricos de Morelia.

Es un agradable lugar para que puedas caminar y gozar del ambiente colonial y único de Morelia.

Se localiza a unos cuantos metros del Acueducto y la Fuente de las Tarascas.