Fue en sus alrededores donde se establecieron las primeras destilerías e tequila hace más de cinco siglos. Es por esto que es un lugar lleno de historia y leyendas.

Para entrar al pueblo tienes que pasar por una curva pronunciada que tiene forma de herradura y que termina en el cementerio, aquí cuentan que ha habido muchos accidentes por lo que los lugareños tienen muchas historias que contar.

Tiene una peculiar plaza principal ya que a un costado de la plaza corre un manantial. Junto al manantial se encuentran algunas cuevas que puedes conocer, aunque debes de tomar en cuenta que debido a la humedad te recomendamos utilizar botas de hule.

Sin embargo, aquí no terminan los atractivos de Amatitán, ya que a dos cuadras de la plaza puedes visitar un excepcional restaurante ubicado en unas grutas. Más allá del restaurante puedes explorar las grutas hasta llegar al lugar en donde se puede ver como el agua del manantial emana de las paredes.

Además, puedes visitar el museo para conocer un poco más sobre la historia del pueblo.

No muy lejos está la Hacienda La Cofradía que es otro de los lugares misteriosos y llenos de leyendas de la región.

Puedes gozar de los paisajes agaveros en un paseo a caballo y acercarte al impresionante Volcán de Tequila.

A solo 20 minutos se localiza la Presa de Santa Rosa, si eres amante de la naturaleza no te puedes perder este recorrido, ya que el camino está lleno de bellos paisajes.

Se ubica aproximadamente a hora y media de Guadalajara.