Siglo XIX

En 1580 León es elevada a la categoría de Alcaldía Mayor, y el 2 de junio de 1830, se le dio el título de Ciudad dedicándola a la memoria de los hermanos Aldama.

Desde entonces, la ciudad ha presentado un desarrollo económico, educativo y cultural. La industria textil y de zapatos han sido de las más representativas de la ciudad.

El Templo del Oratorio fue construido en 1830. El padre Ignacio Aguado, apoyó fuertemente la educación superior y fundó colegios como el de San Francisco de Sales establecido desde 1840, y el de la Madre Santísima de la Luz fundado en 1844.

También el el siglo XIX, se lograron las nuevas construcciones de importancia, como la de “La Calzada”, primeramente y después su puente en 1849. Otras edificaciones que dieron orgullo a los leoneses fueron la reconstrucción del Convento y Colegio de los Padres Paulinos que, con adaptaciones, se transformó en Palacio Municipal a partir de 1869. También se contó con nuevos mercados como el Mercado Hidalgo, mejor conocido como “El Parián”, inaugurado en1866, y el Mercado Aldama, llamado de “La Soledad”, inaugurado en 1883.

El Teatro Doblado, se concluyó en 1880, y la Catedral es consagrada por el primer obispo Díez de Sollano y Dávalos, el 16 de marzo de 1866, para alojar de forma definitiva a la Santísima Virgen de la Luz, patrona de los leoneses.

La prosperidad alcanzada durante la segunda mitad del siglo XIX, dio a León la categoría de segunda ciudad de la República, dado su alto índice demográfico. Sin embargo, debido a las inundaciones de 1865 y la de 1888, así como debido a las epidemias de tifo y escarlatina de 1892 y de 1908, el impulso económico se vio muy mermado.

Sin embargo, a pesar de los problemas que enfrentó la ciudad se siguieron haciendo obras importantes. En 1883 se construye el Parque Manuel González, el antiguo Paseo del Ojo de Agua que en la actualidad es el Parque Hidalgo. A instancias del obispo Don Tomás Barón y Morales se contó con el bello Puente del Coecillo, a partir de 1889. En 1896 fue inaugurado el Arco de la Calzada dedicado a los héroes patrios, que con el tiempo se convertiría en un verdadero símbolo de la ciudad de León.

De esta forma, al terminar el siglo XIX León es una ciudad pujante, industrial y exitosa en el comercio. Una de las principales razones de éste progreso económica es el buen acceso a las vías de comunicación y al uso de transportes como el ferrocarril que conectaba a León con las grandes ciudades como México, Guadalajara y Ciudad Juárez. Adicionalmente, en el ámbito local se esableció el servicio del tranvía con varias líneas.

Era Moderna

León fue la primera ciudad de México con una planta eléctrica, la cual se ubicó en la fábrica de textiles “La Americana”.

A lo largo del siglo XX, León llegó a consolidarse como una moderna y próspera ciudad con amplias perspectivas de crecimiento.